domingo, 12 de diciembre de 2010

Domingo 100 jaja.

El peligro mayor de los domingos es creer que existen de verdad, pues todo en el domingo es sueño y es ficción. Los feligreses en la iglesia son marineros borrachos, tirados en los muelles, soñando su redención. El cura es sólo el sueño de un loco intoxicado. Los jefes de estado sueñan que ya no son culpables, y que pueden sonreír. Hay culturas que saben desde siempre que el domingo sólo puede soñarse, y por eso las noches del sábado las pasan bailando de modo ritual, y embriagándose, preparando un buen sueño, y protegiéndose de las pesadillas.


P.D. cuenten las palabras sin contar la postdata...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentate algo...

¿Qué te parece?

Datos personales